viernes, 28 de febrero de 2014

Una librería contagiosa



Hay una librería en un municipio de Tarragona llamado Valls cuya novela más vendida es ’En lugar seguro’, en su traducción al catalán, ‘En lloc segur’. ¡Qué extraño! Pero lo dice su propietaria, Júlia Secall Roca, en una entrevista que sale publicada en Qué Leer, así que será verdad. Júlia habla de sus clientes como de una parroquia cómplice que se renueva “y nunca deja de brotar”, y afirma que el sentido de su trabajo es “hacer de la librería un lugar seguro” donde contagiar su pasión por la lectura. 

Por la fotografía que publica la revista, parece una de tantas librerías que uno puede encontrar en cualquier ciudad pequeña. Detrás del mostrador se ven artículos de papelería bien ordenados en los anaqueles. Hay unos cuantos bestselers apilados y bien visibles. En un rincón, encima de las estanterías, están estratégicamente dispuestos varios libros ilustrados de ‘El Principito’. Eso es lo que vería un paseante distraído que atisbara desde la puerta. Nada del otro mundo.

Sin embargo, si el paseante se fijara bien en el escaparate empotrado junto a la puerta o entrara y se acercara a las estanterías que hay a la derecha del mostrador, vería lo que tiene de especial esta librería. Yo lo he hecho a través de su página de Facebook. Y allí he encontrado a Anis Nin, Elizabeth Bowen, Janette Winterson, Delphine de Vigan, Anne Beattie y, por supuesto, Virginia Woolf. Una al lado de la otra, seleccionadas con motivo del Día de la Dona. Alguna vez debió estar ‘En lloc segur’ en un puesto de honor junto a otros libros preparados por Júlia Secall Roca para salir volando de la librería y propagar por las calles el amor por el papel. 


¡Qué suerte tienen en Valls!

2 comentarios:

  1. Es que hay libreros que lo llevan muy dentro. Ser librero o librera no es solo vender libros...
    Un saludo,

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    Respuestas
    1. Claro, y son los mejores. Ojalá hubiera uno así en cada ciudad.

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